Entra en un vagón

¿Qué es el Convoy 89?

Dicen los que no lo conocen que no es un tren como los demás, que es un tren fantasma, que aparece y desaparece de las estaciones varias veces a la semana, cuando nadie mira. Nosotros discrepamos, como si conociéramos algo más allá del vagón del que formamos parte. Viajamos en él y, sin embargo, se nos hace cuesta arriba definirlo. Sí podemos asegurar con certeza que este tren es un tren caleidoscópico. Un tren sin origen ni destino. Un tren que podría ser la vida, si la vida fuera ir montado en un tren.


Pasarán cosas, pero los que formamos parte del Convoy 89 no sabemos qué. Tampoco sabemos cuándo. Ni siquiera sabemos si esto no terminará teniendo poco o nada que ver con el enigmático tren inicial. Es probable que terminemos bajando en cualquier estación y enfrentándonos a retos que suponíamos ya olvidados. Pero también es posible que la seguridad del vagón nos impida enfrentarnos a esa otra vida que no transcurre traquetando por encima de una vía que se acerca implacable al horizonte. Esa misma vida que abandonamos en un andén el día que decidimos montarnos en el Convoy 89.